El pasado 18 octubre a las 19h en la Sala Inusual Project de Barcelona se presentó el primer poemario de Sergio Espinosa, Hacia la mudez, publicado por kriller71ediciones en su colección Púlsar. Poémame fue hasta allí.
Sergio Espinosa, Jerez de la Frontera, 1988. Sus poemas se han publicado en antologías y revistas internacionales y han sido traducidos a doce idiomas.
Sergio Espinosa hace una apuesta valiente apoyada por sus editores (más valientes todavía), Aníbal Cristobo y Lola Nieto, en este primer poemario con unos poemas en los que la oralidad son la fuerza que los mueve a pesar de / gracias a la mudez, a la ausencia de voz por la imposibilidad o negación que transmiten sus versos. Las cinco partes del libro destilan un monólogo interior que sale o huye de la poesía fácil de las grandes multinacionales de la edición.
Antes de elegir el título definitivo del poemario, Hacia la mudez, el autor barajó la posibilidad de titularlo Fractales, título interesante para un conjunto de poemas cuyas palabras tienen una estructura básica, fragmentada o aparentemente irregular, que se repite a diferentes escalas.
dibujando soles en la espalda amiga he pensado he
girado sobre nuestros cuerpos has sido la mejor versión
posible has querido siempre y evitado cuando si mañana
siempre llueve solo perderás el alba pero si mañana no
estás sano hoy eres del vencido solo una costilla mas
En las partes del poemario podemos ver que a veces utiliza la cursiva (cuando escribe con mayúsculas y signos de puntuación) y otras veces utiliza la redondita (cuando escribe sin mayúsculas ni signos).Los poemas forman la imagen de un espejo desencajado hecho de palabras cuyo significado depende del contexto en el que se encuentren. Un poemario que tardó, en palabras de Sergio Espinosa tres años en ser escrito y cuatro en ser corregido.
A lo largo de las páginas del libro, las palabras van goteando poco a poco hasta ir cayendo a raudales hacia el final del poemario. Pasa de un verso en la primera página* a trece en la última.
vives en este mundo y nadie ve a través de la niebla
Poemas en los que se nota que el poeta necesita crear sus mundos propios, en los que la persona que los lee está cercana a pesar de que el discurso no lo es. El poeta escribe para ser leído, intenta acercarse al lector huyendo de dogmas y verdades absolutas.
invoco: suturo: que quien obre el milagro también
construya el templo
Una parte sorprendente de la lectura poética y que dio una plasticidad increíble a las palabras de Sergio Espinosa fue la gestualidad de su amigo Albert, el interprete de signos. La majestuosidad del lenguaje de signos llegó en algunos momentos a superar el sonido de las palabras de los poemas recitados por Espinosa.
Si algo no me gustó de la presentación fue la exagerada utilización de un lenguaje en algunos momentos muy obtuso y rebuscado en las preguntas que llevó a situaciones cómicas cuando el poeta, una vez acabada su respuesta, se dirigiera al público y les preguntase: ¿Lo habéis entendido? Porque yo no.
¿Podría usted contarnos un poco de su vida y actividad literaria?
Me dedico al mundo de la traducción desde hace unos diez años. Llegué a la actividad literaria, en primer lugar, leyendo. Más tarde, escribiendo y traduciendo a otros.
¿Cuáles fueron sus primeras lecturas poéticas y qué autores le influyeron?
Las primeras lecturas fueron probablemente las escolares: Romancero gitano de Lorca o Campos de Castilla de Machado. Ya pasados los años, la obra de Chantal Maillard ha sido transversal a mi primer libro.
¿Cómo definiría a su poesía?
Con Hacia la mudez intento presentar una poética plenamente consciente, y propongo un trabajo que desmitifique la propia palabra. Las ideas. Los mundos. Querría, luego, crear puentes.
Que entregar de lejos con la palabra
solo es desconfiar.
¿Cree que el poeta “evoluciona” en su escritura? ¿Cómo ha cambiado su lenguaje poético a lo largo de los años?
Quien escribe cambia, claro. La voz poética, por tanto, también hará propuestas diferentes. Hacia la mudez es mi primer libro, pero empecé a escribirlo hace ocho años. Diría que el mayor cambio gradual en mi lenguaje ha sido el de desconfiar de aquello que tiene muchos nombres. Trabajar más con palabras como “hombre”, “casa”. Crear imágenes a partir de ellas.
¿Cómo siente que un poema está terminado y cómo lo corrige?
Visualizo el poema como un goteo. ¿Cuándo está lleno el lago? No lo sé. ¿Debe estar lleno? La corrección la planteo de una forma metódica: el texto no debo entenderlo solo yo, debe responder a una realidad común. Debe ser necesario. Si no lo es, no sirve.
¿Cuál es el fin que le gustaría lograr con su poética?
Crear puentes. Puentes que conecten mundos. Con Hacia la mudez, me interesa cuestionar lo establecido, ponerlo en duda. Creo que hay muchas cosas que poner en duda hoy en día. Siempre.
¿Qué lugar ocupa, para un poeta como usted, las lecturas en vivo?
Los poemas deben poder leerse, cantarse. Al escribirlos, la oralidad es inherente. Las lecturas en vivo sirven para levantar al texto de la página, darle una dimensión necesaria. Recitar es indispensable.
¿Qué opina de las nuevas formas de difusión de la palabra, ya sea en páginas de Internet, foros literarios cibernéticos, revistas virtuales, blogs, etc.?
Lo digital es tan válido como lo analógico. Yo comencé escribiendo un blog en 2008 y casi diez años después he publicado un libro en papel. La virtualidad responde a una realidad diferente, sí, pero es una herramienta de difusión inmediata que ya está instalada en casi todas nuestras casas.
¿Podría recomendarnos un poema de otro autor que le haya gustado mucho?
‘Deseo de ser arquero’, de Ruth Llana. Está en su libro Tiembla (Point de lunettes, 2014)
¿Qué libro está leyendo en la actualidad?
Esta semana justamente releía Parte de nieve, de Paul Celan.
la merodeante convicción
de que esto hay que decirlo de otro modo y no
así.
Paul Celan (cita al inicio de «Hacia la mudez»)
¿Qué consejos le daría a un joven escritor/escritora que se inicia en este camino de la poesía?
Escribe, corrige, y luego vuelve a corregir.
¿Cómo ve usted actualmente la industria editorial?
Si hablamos de poesía, y si hablamos de España, creo que las propuestas de casas editoriales como La Bella Varsovia han marcado una diferencia en la industria actual. Como lo hizo DVD hace unos años.
¿Cuál es la pregunta que le gustaría que le hubiera hecho y no se la he hecho?
¿Quieres preguntarme algo?
Por último y fuera del cuestionario nos gustaría que se autograbase recitando un poema que usted haya escrito y sea especial por algún motivo y nos explicase el porqué para nuestro canal de Youtube. Gracias.
Muy bien. Espero que os guste.
En el momento de cerrar la edición de este artículo, Sergio Espinosa lee un poema en el programa Página Dos de RTVE el 7 de noviembre. Le podéis escuchar en el minuto 17.
Y a vosotros, lectores, esperamos que hayáis disfrutado la entrevista y gracias por haber llegado hasta aquí.
ACTUALIZACIÓN: Sergio Espinosa estará presentando «Hacia la mudez» en Sevilla (1 DIC, Librería Casa Tomada) , Madrid (9 DIC, Arrebato Libros), Barcelona (14 DIC, Malpaso Librería) y Jerez (22 DIC, Alcázar).
Trackbacks / Pingbacks