Conozco a María (Chiqui para los amigos) desde siempre. Amiga de mis hermanas primero, y después mía también, gracias a la poesía y los libros nos fuimos conociendo un poco más. Su familia es vecina del mismo barrio en mi pueblo. Conocí mucho a sus abuelos, personas sencillas y entrañables. Una paisana querida por todos y muy conocida por ser la Bibliotecaria. Fue quien me organizó y ayudo con la presentación de mi libro, siempre estaré agradecida, el cariño y la dedicación que le puso.

A continuación dejo esta entrevista, no solo para que la conozcáis un poco a ella, además para que conozcáis también como son y viven las bibliotecas de municipios pequeños, esos de los ahora tan nombrados de “la España vaciada”.

– ¿Cómo decidiste hacerte bibliotecaria?, ¿acaso eres una romántica sin esperanza como el protagonista de Farenheit 451? Háblanos un poco de ti.

Pues la verdad es que a mí siempre me gustó el mundo de las bibliotecas, por mi carácter tranquilo, por mi timidez, y mi amor por los libros y la literatura, pensaba que sería mi lugar ideal para trabajar. También influyó mi madre que ella es la primera bibliotecaria de la familia.

– Cuéntanos brevemente la historia de la biblioteca donde trabajas, ¿qué tiene de especial?

La biblioteca municipal de El Barco de Ávila “José María Rodríguez Méndez” es una biblioteca rural de un municipio de menos de 2.500 habitantes. A los usuarios se les da un trato muy personalizado, puesto que nos conocemos todos. El edificio histórico de 1653, con suelos y techos de madera le da un cariz muy personal y acogedor.

Puerta de la Biblioteca

– ¿Cuántos títulos tenéis aproximadamente?

La biblioteca cuenta con unos 20.000 libros y más de 900 audiovisuales además de los periódicos que recibimos a diario. Podemos presumir de ser la primera de la provincia y de la segunda de la capital en integrarse al catálogo informatizado unificado de bibliotecas de Castilla y León (Absysnet) en 2011.

– ¿Cómo es el cliente tipo de la biblioteca? ¿Cuál es el género que más se lee?

Al ser una biblioteca pública, sus usuarios son muy variados con edades comprendidas entre un año y 93. Entre la población adulta destaca la mujer ama de casa de edades comprendidas entre 40 y 90 años. También hombres generalmente desempleados, un poco más jóvenes entre los 35 y los 75 años en menor medida.

Y entre el público infantil niños de 1 a 11 años. Siendo el tramo que menos lee, niños desde 12 a 18 años.

– ¿Escribes? ¿Te gustaría publicar algún día o te quedas solo en lectora y bibliotecaria? 

Siempre me ha gustado escribir, fundamentalmente poesía, pero nunca he publicado nada. Ahora me estoy adentrando en el apasionante mundo de la poesía japonesa gracias a mi amiga y senpai Hortensia Márquez Chapa.

– Dime tres requisitos imprescindibles para ser bibliotecaria.

Empática, apasionada y paciente.

– ¿Cómo haces para recomendar libros?, ¿tus gustos?, ¿la vestimenta de quien te pregunta?

Como ya dije antes, en un pueblo pequeño nos conocemos todos, y después de 17 años de profesión es fácil adivinar sus gustos. También me baso en opiniones de otros usuarios y recomendaciones de libros en blogs y redes sociales.

– ¿Tienes alguna receta para incentivar la lectura? ¿Realizáis algún evento para vuestros lectores?

Organizo diversas campañas para incentivar la lectura, concretamente ahora estoy llevando a cabo la campaña “PORQUE LEER TIENE PREMIO”. Les entrego a los usuarios infantiles una cartilla de cupones que tienen que ir completando según se llevan libros en préstamo, cuando completan la cartilla de 24 cupones reciben un premio valorado en un lote de libros con su correspondiente cartera o maleta de tela.

Uno de los rincones de la Biblioteca

– ¿Crees que los libros digitales están cambiando el mercado?

Los libros digitales en esta población pequeña rural, aún no han tenido tanta transcendencia, bien es verdad que alguno se ha cambiado al e-book pero la mayoría sigue prefiriendo el papel tradicional para sus lecturas.

– ¿Cuál es el rasgo diferencial de una biblioteca de pueblo con respecto a la de una ciudad?

El trato personalizado, nuestra labor muchas veces de psicólogos detectando que necesitan los mismos usuarios concretos en momentos determinados.

– ¿Cuál ha sido tu momento más dulce o la anécdota más divertida que has vivido como bibliotecaria?

El edificio histórico albergó en sus inicios la “Cárcel Nacional” y muchos turistas cuando vienen a visitarla dicen a menudo la misma utopía: “ojalá todas las cárceles del mundo se convirtieran en bibliotecas”.

– ¿Qué es lo que menos te gusta de un cliente y de tu profesión?

De la profesión no me gusta que la cultura en general y  las bibliotecas en particular son las grandes olvidadas siempre en los presupuestos generales.

– Para terminar me gustaría que nos recomendases los tres libros que más te han apasionado y el que nunca volverías a leer.

Tres libros que me han apasionado

  • “El principito”.
  • “De parte de la princesa muerta” de  Kenize Mourad.
  • “Mil soles espléndidos” de Khaled Hosseini.

Nunca volvería a leer la saga del Código Da Vinci

Muchas gracias, María.