Iniciamos nueva temporada reseñando una pequeña gran joya poética que merece especial atención. Se trata de Revivir, un poemario del poeta, novelista e investigador literario Kjell Espmark, nacido en Strömsund (Suecia). Autor de una importante obra ensayística en la que destacan sus trabajos sobre poesía moderna. Desde que empezó a escribir poesía, 1956, ha publicado diecisiete poemarios en los que pasea su mirada crítica por Suecia y la historia de Europa. Es miembro de la Academia Sueca desde 1981 y fue presidente de su comité Nobel.
La edición y la traducción de este volumen la ha realizado Francisco J. Uriz (Zaragoza, 1932) poeta, dramaturgo y traductor galardonado en dos ocasiones con el Premio Nacional de Traducción (en 1996 por Poesía nórdica, en el 2012 por el conjunto de su obra). En 1975 la Academia Sueca le otorgó el Premio de Traducción y en 2008 el Premio por la Difusión de la Literatura Sueca en el Extranjero. En 2008 el Gobierno Español le concedió la Encomienda de la Orden del Mérito Civil. Fundador de la Casa del Traductor de Tarazona.
La calidad y cuidado de la edición por parte de Libros del Innombrable ya son un adelanto de la joya que tenemos entre manos. Esta pequeña gran editorial, a la que le dedicamos un artículo el pasado mes de mayo, no solo ha publicado Revivir de Espmark, anteriormente publicó varios de sus libros que el que suscribe va a adquirir sin demora.
En sus poemas, el autor resucita a personajes que toman cuerpo, o en este caso voz, a través de los versos: desde el lejano héroe Gilgamesh hasta la periodista Marie Colvin, muerta en Siria en 2012. Kjell Espmark homenajea a cada uno de ellos y ellas reviviéndolos. Veinte voces muertas que, tal como ha dicho el periodista Miguel A. Ordovás, «se enfrentan desde el otro lado a su propio destino, la mayoría de las veces más sufrido que gozado, para evocar una serie de semblanzas morales en las que a un tono de abatimiento se suele sobreponer una grandeza de ánimo y espíritu».
Somos conscientes de que con la traducción del sueco al castellano perdemos una parte importante del sentimiento de los poemas, pero aún así, las traducciones consiguen que los versos se conviertan en algo más que palabras, son mensajes y sensaciones que llegan al lector.
Para facilitar la comprensión de cada uno de los personajes, en la parte final del poemario, nos encontramos los comentarios del autor y del traductor, donde se aclara quiénes son los protagonistas de los poemas.
Os recomiendo encarecidamente que le deis una oportunidad a este poeta venido del norte y compréis su libro. No os arrepentiréis.
Hay una resurrección
incluso del más profundo olvido.
Miles de años
estuve enterrado en arena e indiferencia
hasta que me sacaron a la luz,
me quitaron la arena de los ojos
y trataron de ponerme de pie.
Me proporcionaron un pasado con ayuda de unos signos
que habían estado largo tiempo en desuso
y recuperé el nombre de Gilgamesh.
Mientras acabo de redactar esta reseña me entero que dentro de pocas semanas, Libros del Innombrable va a dar a luz una antología poética titulada Algunos de los nuestros (nórdicos), que seguro que será una delicia.
Trackbacks / Pingbacks