¡¡¡Shhh!!! ¿Lo oís ? ¿Oís la percusión de esas manos? ¿Escucháis el palpito de las yemas desnudas? ¿Sentís el latido que se entrelaza el alma con la sensibilidad del poeta? ¿La fusión de unas palmas abiertas que hace vibrar el corazón al ritmo de unos bongos que derraman tinta?

Plexus sangrante

Estalla la granada emocional
y cada una de sus esquirlas
se acuna dentro la piel

Ojos cerrados
sangran imágenes
recuerdos de archivo

Penden del cuello
un par de tragos
gruesos cortantes
y la añoranza
de un fuerte remedio etílico
para sanarles

Manos entreabiertas
no terminan la oración
cuándo se acercan al pecho
para ayudar a las pulsaciones
a coserle nostalgias

Remiendan la piel
mientras cada poro
recita un dolor
por cada felicidad

La herida se ama
cómo regalo de vida…
La esquirla se atesora
cómo un punto de no retorno…

Camino de nuevo
con el plexus sangrante
la vista perdida
y la mente anclada
en un horizonte quebrado
que traga mis soles uno a uno
trayendo cada noche
la gratitud impregnada
en los latidos de un corazón intacto…

Músico y poeta, Carlos Alberto de la O Tapia también conocido como Transmisor d Sinestesias es admirado y querido en nuestro bar de letras y colaborador en la Revista de Poémame con textos dedicados a la poesía de Alfonsina Storni, Sor Juana Inés de la Cruz o Frida Kahlo.

Ciento once lágrimas

En un cajón yace
la caricia extraviada
flujos de sol alumbran
los restos de una esperanza
que se cansó de beber frialdadNo hay nieve
que haga hervir un alma
no hay silencio
que haga brotar palabras
no hay distancia
que haga sentir el latido…
misterio del abrazo

En un viejo zaguán
se refugia un último recuerdo
salpicado por intensa lluvia
de pretextos…

en la alcantarilla
está atorado
el barco de papel
de una tarde de sonrisas
a punto de ser tragado
por la corriente
de lo cotidiano…

Manos lastimadas no cierran
no retienen el amanecer
de la caricia suprema

la garganta traga los cristales
que ciento once lágrimas
dejaron entre los labios…

En algún punto
entre pecho y espalda
queda extraviada la daga
con que noche a noche
se lacera la carne
cuando el corazón duerme
entre tus memorias…

Carlos Alberto es un poeta de pluma suave y tinta intensa, enamorado de las décimas espinelas y de pie forzado, es admirable su maestría para bordarlas:

Quisiera desde la luna

Quisiera desde la luna
mirar esos negros ojos
quitándole los cerrojos
a esta tremenda infortunaSi pudiera desprenderme
de este dolor tan amargo
salir de este cruel letargo
para en tus noches perderme.
No sé si vuelvas a verme
navegando tu laguna
fundiéndome con alguna
brisa suave de tu vuelo
vigilar siempre tu cielo
Quisiera desde la luna

Acompañar a tu ocaso
paseando en tus mejillas
ser esa luz con que brillas
ser refugio, ser tu abrazo;
Cortar ese fuerte lazo
que sujeta los antojos
mientras postrado de hinojos
al fuego del corazón
encuentra el alma razón:
mirar esos negros ojos

La piel acciona al momento
no existe paz en tus mares
tus silencios son majares
que suprimen al tormento.
Tu espíritu es elemento
con aura de intensos rojos
fríos se vuelven despojos
libera tantas pasiones
llegando hasta sus prisiones
quitándole los cerrojos

Uno queda así cautivo
atrapado en tu torrente
convirtiéndose en demente
en ese ritmo abusivo.
Tu proceder adictivo
tu fuerza, como ninguna,
tu luz, regazo que acuna,
tu esencia tan ejemplar
que ya comienza a eclipsar
a esta tremenda infortuna

Cuando el silencio habla a través de la tinta , el eco se escucha en el alma y las letras besan los ojos.

Un favor

Que este silencio repose,
añejado entre razones,
mientras ambos corazones
hacen que la intriga goce;
hagamos pues el desglose,
desmenucemos el celo…
tu argumento lanza al vuelo
si No estás arrepentida,
que sea el dolor bebida
y que embriague este desvelo…Porque no podré negarme
a mi mismo, que te extraño,
si ya he causado algún daño
no te culpo por odiarme.
Mas, si puedes perdonarme
quiero pedirte un favor :
¡Bésame! sin más pudor
y si ya no sientes nada,
aléjate así confiada…
puedes marcharte… mi Amor…

Algunos venden su alma al diablo, Carlos Alberto nos vende su corazón con la sensibilidad y originalidad de estos versos:

Vendo corazón

Vendo Corazón
Completo o por piezas:Modelo 1980
N pasajeros
Carrocería clásica reforzada
a prueba de impactos fuertes

Motor poético de 16 válvulas
con 90 Caballeros de fuerza
Respuesta de 1.8 kiloCaricias por litro
Aceleración de 0 a 200 en una mirada

Acabados en acero Inolvidable
Quema locos
Protección nocturna
Vestiduras en piel erizada
Faros de niebla pecadora
Silenciador de secretos

Soporta condiciones inestables

(Precio a negociar
por algunos rayones al interior y exterior)

Versos que tiemblan, piel desnuda en la pluma derramando su tinta, corazón que siente y que el poeta vive. Que continúe el viaje… ¡Vida!

Soportar el viaje

La podredumbre
invade la epidermis
hongos nacen
musgo venenoso
que agria el aguaCalavera que dirige un barco
aire pestilente
que parte las fosas nasales

Soportar el viaje
esperando el corte en el cuello
navego involuntariamente
traído por algún capricho de un ego

Una caravana de sinsabores
rodean el paso
el destino baja la mirada
tragando lágrimas
que refrescan sus llagas

saca un sollozo
que se sujeta a la otra orilla…
en la mano
se dibuja la ruta inevitable

y en la frente
marca su hierro
el misterio,
ese centinela de la vida…